Oliver, es bueno que nos hayas pedido un proyecto de ley sobre los curanderos espirituales, porque en este ámbito de la regulación de las relaciones entre los curanderos humanos, por un lado, y el Estado, por el otro, hay una brecha, por no decir un abismo. Por lo tanto, esperamos que este proyecto de ley sobre el sanador espiritual sea un puente que borre el malentendido entre las dos partes.

Así, el Artículo 1 del proyecto de ley sobre curanderos espirituales dice:

Una persona que es capaz de canalizar energías curativas al plano físico del planeta Tierra debe ser considerada un sanador espiritual.

Artículo 2
La curación espiritual puede ser practicada por cualquier persona que sea capaz de cumplir las condiciones especificadas en el artículo 1.

Artículo 3
Los curanderos espirituales no deben formarse en las ciencias médicas, porque la curación espiritual, como forma de ayudar a las personas, adopta un enfoque completamente diferente al problema de provocar y curar trastornos y enfermedades.

Artículo 4
Los sanadores espirituales deben comportarse de acuerdo con los más altos estándares morales cuando se trata de visitantes que necesitan su ayuda. Con esto nos referimos a una actitud cultural y honesta hacia los visitantes por parte del sanador espiritual, y también viceversa.

Los curanderos espirituales no necesariamente tienen un título médico, pero esto no los exime de su responsabilidad y alto enfoque ético hacia cada visitante. Esto significa que deben tratar a los visitantes con respeto, pero también al revés.

Artículo 5
Los curanderos espirituales pueden recibir gratitud por sus esfuerzos de los visitantes que solicitan curación para ciertos trastornos o enfermedades, pero esta tarifa no debe ser una cantidad fija. Depende del visitante si se invierte dinero en la caja para este propósito y cuánto, y el sanador espiritual no debe interferir ni influir de ninguna manera en esto.

Si los visitantes que necesitan curación no pueden, actual o permanentemente, dejar una cierta cantidad de gratitud monetaria como forma de agradecer al sanador, el sanador espiritual está obligado a proporcionarles el procedimiento de curación de todos modos.

Artículo 6
Los curanderos espirituales pueden ser personas de ambos sexos, profesiones y grados de educación, pero lo que es único para todos ellos es el cuidado de los visitantes y su salud. En este sentido, el curandero espiritual no debe dar al visitante ningún consejo que pueda suponer un deterioro de su salud o poner en peligro su vida.

Artículo 7
Los curanderos espirituales pueden registrar instalaciones en las que practicarán la curación espiritual y el Estado no los prohibirá de ninguna manera. Este ámbito necesita una regulación jurídica detallada.

Artículo 8
Los curanderos espirituales no están obligados a colocar imágenes de figuras gubernamentales y religiosas en las instalaciones donde realizan curaciones, ya que no tienen nada que ver con la curación espiritual.

Artículo 9
Los sanadores espirituales, a petición de un visitante, pueden realizar una curación a una persona que, por razones razonables, no puede estar físicamente presente, y todo lo que hemos dicho en artículos anteriores del Proyecto de Ley de Sanadores Espirituales también es cierto a este respecto.

Artículo 10
Un sanador espiritual es principalmente aquel que, basándose en su talento para canalizar energías curativas espirituales, puede mejorar la salud de un visitante sin recurrir a procedimientos comunes en la ciencia médica. La base en la que se sustenta su éxito en la curación de los enfermos es la canalización de energías curativas espirituales que están presentes en todas partes del Universo. Al enviarles una solicitud, el sanador espiritual mejora o cura por completo los trastornos y enfermedades presentes en el visitante.

Artículo 11
El sanador espiritual bajo ninguna circunstancia debe abusar de la confianza del visitante, ni de su posición de dependencia en relación con él. Es muy importante señalar cómo los sanadores espirituales deben comprender a tiempo qué responsabilidad tienen al actuar sobre una persona.

Con esto nos referimos a actuar en los tres niveles de la existencia humana: físico, emocional y mental, mientras que cuando se trata del nivel espiritual, el sanador espiritual deja que el visitante actúe cuando esté listo.

Artículo 12
Los sanadores espirituales no son ángeles hechos de la espuma del mar, sino personas que tienen obligaciones tanto para con sus seres queridos como para con ellos mismos. Por lo tanto, le recomendamos encarecidamente que los trate con respeto para ayudarlos a funcionar lo más eficazmente posible en un sentido curativo. Esto también implica la ausencia de hostilidad hacia ellos.

Artículo 13
Los curanderos espirituales, cuando trabajan con visitantes, deben cumplir con todos los artículos de este proyecto de ley sobre curanderos espirituales para que lo que están tratando, la curación espiritual, dé los resultados más positivos.

Estos trece artículos del Proyecto de Ley de Sanadores Espirituales forman la base sobre la cual es posible que las personas que tienen talento para canalizar energías espirituales puedan practicar la curación espiritual si así lo desean.

Energías Espirituales del Universo

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70 La Ley Sobre los Curanderos Espirituales
521 Sobre la Curación de Niños a Distancia

19 de noviembre, año 16 del Eón de Acuario

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